Un soldado revolucionario nacido en Colotián, Jalisco, llamado Eusebio Joaquín González, en 1925 se hizo ??bautizar? de nuevo en una secta de tipo pentecostal, pero al no poderse colocar como líder, decidió sin más fundar su propia iglesia.
Diciendo que tuvo una revelación de parte de Dios, se cambió el nombre por el de Aarón y ya en 1927 tenía un grupo de seguidores, rodando de herejía en herejía.
No cabe duda de que trabajó arduamente y con mucho éxito económico ya que pudo comprar en Guadalajara nada menos que 14 hectáreas para fundar una colonia llamada la ??Hermosa Provincia? en la cual fue el cacique absoluto envuelto en toda clase de escándalos económicos y sexuales, hasta su muerte, dejando el imperio en manos de su hijo.
Secta fanáticamente anti-católica, plagada de errores doctrinales, se ha difundido por desgracia en nuestra Patria debido principalmente a la ignorancia religiosa de nuestro pueblo.